Yanina Latorre confesó que metió famosos escondidos a su casa en cuarentena y Marcela Feudale se indignó: "Es una pena, duele"

Yanina Latorre confesó al aire de LAM (América TV) que cometió una infracción durante la cuarentena: escondió a tres famosos en el baúl de su camioneta para ingresarlos a su casa, cuando estaban prohibidas las reuniones. 

Pese a que la angelita narró la situación a modo de anécdota, Marcela Feudale se indignó con ella y la cruzó. "Es una pena, duele", manifestó.

Por qué se cruzaron Yanina Latorre y Marcela Feudale

"En cuarentena vinieron a comer a casa, los metí en el baúl de la camioneta, los tapé de camperas y al de seguridad que te quería revisar el baúl le dije que no se acercara al auto. Tapamos todas la ventanas y hablamos bajo en el quincho de casa. Fue una contravención, no un delito", confesó la esposa de Diego Latorre, revelando que los famosos invitados eran Santi Maratea, Martín Cirio y Lizardo Ponce.

Nazarena Vélez se percató que Marcela Feudale estaba seria mientras Yanina Latorre hablaba y la locutora explicó: "Estoy pensando cuántos boludos nos quedamos encerrados y cuántos otros estaban derivando por ahí, ¿no? Mientras otros pensábamos cómo seguir viviendo. Es una pena, duele. No importa, cada uno sabe cómo regula su vida".

Respecto a cómo vivió la cuarentena, la locutora dijo: "El encierro... uno pensaba en cuidarse uno, al otro, no amontonarse y el barbijo... y veo que había otra frecuencia, pero cada uno lo asumió como quiso". Además recordó que ella optó por no salir a trabajar para cuidar a su madre, quien vivía con ella. 

Tratando de justificar lo injustificable, Yanina se defendió: "Yo no vivía con mi mamá, mi hija trabajaba en el Cantando, yo salía a trabajar también. Esto fue en septiembre/octubre, cada vez más adelante, no al principio. Un día tuve ganas de hacer y lo hice, en mi casa todos salíamos".

Cabe recordar que la esposa de Diego Latorre siempre fue una de las más críticas con Alberto Fernández y Fabiola Yáñez por la famosa fiesta en la Quinta de Olivos en plena pandemia por coronavirus.

R.L