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La tutela de Amanda Bynes se ha terminado, llegando a su fin después de casi nueve años. El juez del Tribunal Superior del condado de Ventura, Roger L. Lund, dictaminó el martes el cese de la tutela de la ex actriz.
Amanda Bynes, que saltó a la fama como actriz infantil en el programa de Nickelodeon "All That" en los años 90 y luego protagonizó una serie de películas de éxito a principios de la década de 2000, ha estado bajo tutela desde 2013.
Con la finalización de la tutela tanto de su persona como de su patrimonio, Bynes tendrá ahora el control de sus finanzas y podrá elegir dónde quiere vivir, cómo quiere llevar su vida y tendrá la supervisión de todas las responsabilidades del día a día.
Bynes no estuvo presente en la audiencia. Su abogado, David A. Esquibias, habló en su nombre. El cese se esperaba, y no hubo objeciones en la sala. El día antes de la audiencia, un juez emitió un fallo provisional, declarando que la tutela "ya no es necesaria", sentando las bases para el fin del acuerdo ordenado por el tribunal bajo el que Bynes había estado viviendo durante más de la última década.
El caso de Bynes es la segunda curatela de alto perfil que capta el interés del público, después de la de Britney Spears, que se puso en marcha en 2008 y se terminó el pasado mes de noviembre, dominando los titulares internacionales con la manifestación mundial del movimiento #FreeBritney.
Qué fue lo que le pasó a Amanda Bynes
En 2013, los padres de la ex estrella infantil, Rick Bynes y Lynn Organ, solicitaron originalmente al tribunal una tutela cuando su famosa hija supuestamente prendió fuego a la entrada de su casa y fue hospitalizada con una retención psiquiátrica involuntaria. En 2014, su madre obtuvo la tutela completa, convirtiéndose en su tutora oficial.
Amanda Bynes, que ahora tiene 35 años y está comprometida, estudia actualmente en el Fashion Institute of Design and Merchandising, donde cursa una licenciatura. "Todos estamos entusiasmados y esperamos ansiosamente que Amanda lleve una vida privada y normal", dijo el abogado de Bynes a Variety a principios de esta semana, antes de la audiencia.
En 2014, Bynes mostró un comportamiento errático en Twitter, publicando una serie de tuits en los que acusaba a su padre de abuso; luego se retractó de los comentarios, diciendo que tenía un microchip en el cerebro, lo que le hizo tuitear las falsas afirmaciones. Poco después, Bynes fue ingresada de urgencia en un centro psiquiátrico de California. Durante ese tiempo, Bynes había tuiteado que le habían diagnosticado "bipolaridad y manía depresiva".
Page Six dio a conocer la noticia de que Bynes presentó -con el apoyo de su madre, su abogado y su psiquiatra- una petición el 23 de febrero para poner fin a su tutela, casi nueve años después de que su hospitalización en una retención psiquiátrica involuntaria condujera a su establecimiento.
También presentó al juez una declaración de capacidad en la que la psiquiatra Kimberly M. Brown, del Centro Médico Cedars-Sinai de Los Ángeles, escribió que Bynes no tiene "ningún deterioro aparente en el estado de alerta y la atención, la información y el procesamiento, o la capacidad de modular el estado de ánimo y el afecto, y no sufre trastornos del pensamiento".
La propia exestrella de "Amanda Show" se pronunció el 7 de marzo, agradeciendo a los fans su "amor y apoyo" en un breve vídeo de Instagram grabado en previsión de la audiencia del martes.
Los padres de Bynes, Rick y Lynn Bynes, apoyaron su lucha por la libertad. Lynn actuó como tutora de Amanda, mientras que Rick fue considerado parte interesada en el caso. "Lynn está muy contenta y emocionada y orgullosa de Amanda y está dispuesta a poner fin a esta tutela basándose en el duro trabajo que ha hecho Amanda", dijo la abogada de Lynn, Tamar Arminak, a Variety el 25 de febrero.
Al día siguiente, Esquibias le dijo a TMZ que Bynes ha hecho "progresos significativos" en la convivencia con su trastorno bipolar. El abogado también señaló que Amanda está sobria después de entrar y salir de hospitales y centros de rehabilitación durante varios años.
"Esos días de experimentación han terminado hace mucho tiempo", dijo Amanda a la revista Paper en noviembre de 2018 sobre su uso pasado de drogas, incluyendo marihuana, éxtasis y Adderall. "No estoy triste por ello y no lo echo de menos porque realmente me siento avergonzada de cómo me hacían actuar esas sustancias", añadió. En ese momento, una persona cercana a Bynes dijo a Variety que la actriz retirada nunca tuvo una adicción a las drogas, explicando que tenía una condición médica que requería supervisión y necesitaba asistencia.
Amanda Bynes ha permanecido fuera del negocio del entretenimiento durante más de una década. Su último trabajo fue la película de 2010 "Easy A", que protagonizó junto a Emma Stone. Después de su salto a la fama como estrella infantil en "All That", consiguió su propia serie de variedades de sketches cuando era preadolescente, "The Amanda Show", que duró tres temporadas y consolidó su estatus de prodigio de la comedia. En la década de 2000, Bynes tuvo un trabajo continuo, protagonizando populares proyectos televisivos y cinematográficos, como "She's the Man" con Channing Tatum, "What a Girl Wants", "Sydney White", la adaptación cinematográfica de 2007 de "Hairspray" y la comedia de televisión "What I Like About You", que coprotagonizó con Jennie Garth de 2002 a 2006.
Qué hace Amanda Bynes hoy
Cuando se le preguntó en qué se está centrando Bynes con su nueva libertad, Esquibias dijo recientemente a Variety: "Además de la normalidad como persona y como estudiante, sé que está deseando saber cuál va a ser su próximo paso. Ella es muy creativa, así que está tratando de encontrar una salida para eso". El abogado mencionó que Bynes está interesada en iniciar una línea de fragancias y posiblemente una línea de ropa y que no descartaría necesariamente un regreso a la actuación.
L.M
