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El 19 de diciembre de 2019 no es un día más en la vida de Silvia D’Auro, la controversial mujer que supo saltar a la fama años atrás por haber sido la esposa de Jorge Rial y ser la madre adoptiva de Morena y Rocío, quienes luego la dejaron de lado acusándola por maltrato.
Desde su separación del conductor de Intrusos (América) en 2011, D’Auro optó por un perfil polémico, yendo desde fuertes acusaciones contra su ex, a quien lo acusó de recibir “sobres” por parte de funcionarios públicos en diálogo con la revista Noticias en 2013, hecho que luego derivó en un duro conflicto judicial.
Como toda persona perteneciente a los medios, la opinión de Silvia siempre se hizo notar, y así fue cómo la conductora radial se erigió como una de las personalidades más “picantes” de la farándula, lanzando palitos no solo contra su ex marido, sino también a quién sea que se cruce en su camino. Pero esto fue así hasta el año pasado.
Con más de treinta nueve mil seguidores a cuestas, Silvia era una de las referentes de Twitter en lo que concierne a despotricar contra famosos y colegas del ambiente, hasta que tomó la drástica decisión de abandonar esa red social el 19 de diciembre del año pasado.
“A los que les gusta la sangre, acá no la van a encontrar, ni sacando conjeturas macabras a las que están acostumbrados. TW OFF”, fue el último posteo de la conductora en la plataforma del pajarito, dejando así desamparados y tristes a quienes querían seguir nutriéndose de sus categóricos puntos de vista, y por qué no, disfrutar de los embates que ella le propinaba a Rial, acusándolo además de haberla maltratado durante los años que estuvieron juntos.
A los que les gusta la sangre, acá no la van a encontrar, ni sacando conjeturas macabras a las que están acostumbrados. TW OFF
— Silvita_65 (@silvita_65) December 20, 2018
Antes de marcharse, D’Auro había lanzado una contundente seguidilla de ataques hacia varias figuras de los medios, como por ejemplo, Ernesto Tenembaum y Alejandro Fantino.
Hasta el momento, el silencio de la conductora parece inmutable e interminable, y una gran prueba de esto fue su decisión de no volver a aparecer en los medios cuando nació Francesco Benicio, el hijo de Morena Rial, y mucho menos cuando su ex se casó con Romina Pereiro.
L.L.
