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Italia ganó el sábado el Festival de Eurovisión con los rockeros Maneskin, que se impusieron en Rotterdam en el regreso del certamen tras un año de descanso por el coronavirus. Sin embargo, minutos antes de consagrarse como ganadores, un video del líder de la banda, Damiano David, agachándose hacia la mesa se viralizó y una lluvia de internautas apuntaron a que el cantante había esnifado algún tipo de sustancia.
La banda italiana Maneskin se ha declarado hoy vencedora de la 65 edición de Eurovisión gracias a los 524 puntos cosechados por su tema "Zitti e buoni", una canción en la senda del "garage rock" y cantada en su idioma, con ágiles cuerdas en la línea de The White Stripes o Franz Ferdinand.
Vestidos con pantalones de cuero y delineador de ojos, la banda italiana conformada por Damiano David, Victoria De Angelis, Thomas Raggi y Ethan Torchio se impuso a la dura competencia de Francia y Suiza para ganar la última edición del concurso televisivo anual, en el que participan intérpretes representantes de las televisiones cuyos países son miembros de la Unión Europea de Radiodifusión.
Pero de Italia, además de su impresionante y avasallante performance, quedará un extraño momento cuyo video, viralizado en las redes sociales, se convirtió en tendencia y por el que muchos se preguntaron si el cantante Damiano David había esnifado una línea de cocaína en pleno aire del festival de Eurovisión. A esta secuencia le siguió una supuesta "patada" o "empuje" que le habría dado el baterista Ethan Torchio al verlo.
Italia ganó la 65 edición del Festival de la Canción de Eurovisión
El triunfo, el tercero en la historia de este país y el primero desde que en 1990 lo consiguiera Toto Cutugno con "Insieme: 1992", se ha producido en una gala por todo lo alto en el Ahoy Rotterdam de la ciudad holandesa del mismo nombre, dos años después del último festival a causa del estallido de la pandemia y con 3.500 asistentes como público.
El español Blas Cantó ha concluido con su tema "Voy a quedarme" en la posición 24, la antepenúltima, en las antípodas de un podio en el que la segunda plaza ha sido para la francesa Barbara Pravi con 499 puntos por el tema "Voilà" y la tercera para el suizo Gjon's Tears, con "Tout l'univer", con 432 puntos.
El emocionante final puso el broche de oro a una noche de brillo y glamour en la ciudad portuaria holandesa, a pesar de las duras restricciones impuestas por la pandemia, que limitaron la audiencia en directo en el Ahoy Arena a sólo 3.500 personas. La competición de Rotterdam se canceló el año pasado por primera vez en la historia del torneo, que cumple 65 años y es uno de los acontecimientos televisivos más vistos del mundo, con unos 200 millones de espectadores.
Pero el tema de Eurovisión de este año era "Open Up", y las restricciones del gobierno holandés contra el coronavirus podrían ser un modelo para eventos como la Eurocopa 2020 y los Juegos Olímpicos de Tokio, a medida que el mundo va saliendo poco a poco del bloqueo.
En los preparativos hubo sustos por el coronavirus, ya que la participación de Islandia, Dadi og Gagnamagnid, no pudo actuar en directo cuando un miembro de la banda dio positivo por Covid. Por su parte, el ganador de Holanda 2019, Duncan Laurence, tampoco pudo subirse al escenario tras presentar síntomas de la enfermedad durante los ensayos de esta semana.
Pero el ambiente de la extravagancia "love-it or hate-it" fue implacablemente optimista, con el foco de atención puesto en las canciones extrañas y maravillosas, las letras cursis y los trajes extravagantes.
L.M
