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"Caprichos, sueños, miedos y reflexiones" son los ingredientes del octavo y último álbum de Taylor Swift, quien sorprendió a sus fans con el anuncio por redes sociales del lanzamiento de Folklore, un disco alejado del género pop que permite apreciar la sencillez de sus letras. Dada la producción más terrenal, el material muestra un lado más auténtico de la cantante.
Por sorpresa y a través de una carta compartida en sus redes sociales, la cantante estadounidense Taylor Swift anunciaba el lanzamiento de Folklore, que se convierte en su octavo álbum de estudio tras el lanzamiento, hace un año, de Lover. "La mayoría de las cosas que había planeado para este verano no han ocurrido, pero hay algo que no había planeado y que sí ha ocurrido. Y eso es mi octavo álbum de estudio, Folklore", dijo la cantante y compositora en su carta compartida a través de Twitter.
"Antes de este año, probablemente hubiera pensado demasiado en cuándo habría sido el momento perfecto para lanzar este trabajo, pero los tiempos en que vivimos siguen recordándome que nada está garantizado. Mi instinto me dice que si haces algo que amas, deberías mostrárselo al mundo", explicó en la misiva 2.0.
In isolation my imagination has run wild and this album is the result. I’ve told these stories to the best of my ability with all the love, wonder, and whimsy they deserve. Now it’s up to you to pass them down. folklore is out now: https://t.co/xdcEDfithq
— Taylor Swift (@taylorswift13) July 24, 2020
📷: Beth Garrabrant pic.twitter.com/vSDo9Se0fp
Con una estética totalmente alejada de anteriores trabajos, dejando a un lado su versión más pop, Swift puso a disposición de su público sus "caprichos, sueños, miedos y reflexiones" en un álbum, compuesto por 16 temas, en el que la cantante muestra su talento como compositora contando historias que atrapan por su sencillez y la calma que provocan.
Asimismo, junto al lanzamiento del disco, Swift compartió también el videoclip de su primer sencillo, Cardigan, cuya dirección de fotografía fue encargada al mexicano Rodrigo Prieto, responsable de la imagen de largometrajes como Brokeback Mountain.
El videoclip logró un millón y medio de visualizaciones en menos de tres horas tras ser lanzado a través de YouTube y, actualmente, acumula más de 3,7 millones, nuevos datos que confirman el tirón de la cantante estadounidense que ha logrado, con Folklore, traer la calma a través de un disco enfocado en "contar historias".
Según aseguraba la cantante, el disco es el resultado de tres meses de trabajo "en aislamiento", durante la crisis del coronavirus, en el que ella misma ha escrito y grabado los 16 temas: Cardigan, The 1, The Last Great American Dynasty, Exile (con Bon Iver), My tears ricochet, Mirrorball, Seven, August, This is me trying, Illicit affairs, Invisible string, Mad woman, Epiphany, Betty, Peace, Hoax y The Lakes.
No obstante, la cantante contó con la ayuda de algunos de sus "héroes musicales" para terminar de darle forma al disco como son los compositores Aaron Dessner, Jack Antonoff, William Bowery y Bon Iver, con quien canta Exile.
La conciencia de sí misma que Swift mostró en Lover se profundiza en Folklore, donde considera sutilmente la frágil línea entre ser una víctima y un catalizador. Las recriminaciones son menos, las peleas más justas, y su sentido de responsabilidad, mayor. La repercusión sobre su imagen pública aún se sienten: "Puedo cambiar todo de mí para encajar", canta en Mirrorball.
En Folklore, Taylor Swift cuestiona su propia autoconcepción y desafía esa mitología personal: cuán útiles y verdaderas son esas ideas para ella misma como una mujer de 30 años.
L.M
