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El amor de la Reina Isabel II por los corgis es reconocido. Su padre, Jorge VI, introdujo la raza en la familia real en 1933, cuando compró uno llamado Dookie. La monarca, además, deja a más de 100 caballos. Ahora, tras su muerte a los 96 años, se cuestiona quién cuidará de sus animales.
Cuántos perros tenía la reina Isabel II
La reina recibió su primer corgi, Susan, para su 18º cumpleaños. Durante su reinado ha tenido más de 30 corgis, muchos de ellos descendientes directos de Susan. Lilibeth también introdujo una nueva raza de perro conocida como "dorgi" cuando uno de sus corgis se cruzó con el perro salchicha de su hermana la Princesa Margarita llamado Pipkin.
En 2018, cuando murió su perro Whisper, se rumoreó que no iba a tener ningún otro perro nuevo. Trascendió que le dijo a su amigo el entrenador de caballos Monty Roberts que "no quería dejar ningún perro joven", indica el The Post. Pero en 2021, en medio de la pandemia, se hizo de dos nuevos cachorros para que le hicieran compañía: Corgi Muick (llamado así por su lago escocés favorito) y Dorgi Fergus (llamado así por su tío Fergus Bowes-Lyon, héroe de guerra).
Fergus, desgraciadamente, murió, pero unos meses más tarde la reina recibió un cachorro de Cocker Spaniel de manos de su hijo el Príncipe Andrés, en el que habría sido el 100º cumpleaños de Felipe. La perra, premiada, se llama Lissy en honor a su dueña. Es decir, antes de su muerte, Isabel tenía cuatro perros: dos corgis, un dorgi y un cocker spaniel. Candy, el dorgi, es el mayor del grupo y se cree que tiene unos 10 años. Lissy, la cocker spaniel, fue el perro más reciente que entró en la familia real en enero de 2022.
La Reina Isabel los paseaba dos veces al día y los perros tenían incluso su propia habitación en el Palacio de Buckingham: "La habitación de los Corgi", donde los cuidaban dos lacayos llamados "Doggie 1" y "Doggie 2".
"Le encantan los animales y adora a los perros. Siempre lo ha hecho, fueron su primer amor y serán el último", dijo la biógrafa real, Ingrid Seward, a Newsweek, antes de que se conociera la noticia de la muerte de la monarca. Seward especuló que, aunque no se ha hecho público ningún plan oficial para los animales, éstos podrían ir a parar a los niños.
"Toda la familia es amante de los perros, por lo que cualquiera de ellos podría llevarse uno o dos", dijo la escritora real Claudia Joseph al medio. "Andrew tiene Cocker Spaniels así que podría llevarse el que le regaló a ella. William y Kate también aman a los perros por lo que podrían tenerlos. O existe la posibilidad de que sigan siendo cuidados por el personal de palacio para que no tengan que ser trasladados".
Penny Junor, autora del libro de 2018: "All The Queen's Corgis", aseguró que el cuidado de los perros ha sido un aspecto del que se ha encargado el personal de la Reina. "El cuidado de los perros ha recaído a veces en lacayos, pero sobre todo en la modista de confianza de la Reina, su asistente y mano derecha, Angela Kelly; y en su igualmente fiable paje de muchos años, Paul Whybrew, a quien se vio paseando con la Reina y los perros en la parodia de James Bond", escribió Junor.
No son solo sus perros lo que la reina deja en el mundo animal, sino más de 100 caballos -incluyendo dos que le fueron regalados con motivo de su jubileo de platino: uno del presidente francés Emmanuel Macron y un segundo del presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev.
La reina Isabel heredó de su difunto padre, el rey Jorge VI, el interés por la cría y las carreras de caballos pura sangre, y se cree que ha ganado unos 9 millones de dólares en premios a lo largo de los años. Hay establos en cada una de sus residencias reales.
Seguía de cerca a todos sus caballos, y su lectura favorita era el diario Racing Post. "Es probable que la hija de la reina, la princesa Ana, y la hija (de Ana), Zara, que fueron ambas amazonas olímpicas y conocidas amantes de los caballos, estén involucradas en lo que ocurra después con los animales de la reina", dijo Joseph.