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María Julia Oliván tiene una extensa trayectoria en los medios de comunicación y en las últimas horas sorprendió con una inesperada confesión: contó que años atrás le dio clases de escritura a Ángel de Brito y Diego Brancatelli.
La periodista estuvo invitada a La Puta Ama, el programa de Florencia Peña en América TV, y habló sobre sus inicios en los medios: "Arranqué a los 17 años. Cuando empecé la facultad ya empecé con un grabador a romper las bolas, a tratar de hacer notas".
"Y cuando empecé a estudiar en la Agencia Universitarias de Noticias, en Lomas de Zamora, hacíamos prácticas y ahí empecé a trabajar ad honorem. Ahí es cuando fui profesora de Diego Brancatelli y Ángel de Brito", reveló.
"Tenemos la misma edad masomenos, pero como yo había empezado tan chiquita, tan acelerada, me pusieron de jefa de trabajos prácticos de Gráfico 2, que es escritura, porque empecé yo con la gráfica", detalló. Además recordó cómo eran Brancatelli y De Brito en aquella época: "Branca siempre me dice que en esa época estaba re buena pero re loca y mala y Ángel estaba siempre con cara de culo".
La lucha de María Julia Oliván por su hijo con autismo
Semanas atrás, María Julia Oliván habló a corazón abierto sobre la lucha por su hijo con autismo y contó que creó un podcast para ayudar a las familias que se sienten desbordadas por la situación.
La periodista mantuvo una comunicación vía zoom con LAM (América TV) para hablar sobre su propia experiencia con su hijo, Antonio, a raíz del desgarrador relato de Analía Franchín sobre la situación dramática que atraviesa uno de sus sobrinos con autismo.
"Escuché lo que contó Analía y la llamé. Quedamos en hablar, más tarde voy a hablar con ella. Le quería contar los tips para los chicos que tienen este problema en la piel y poca sensibilidad y no sienten que se están lastimando. Pero la situación de violencia que atraviesa la familia es complicada. La familia es el apoyo fundamental", comenzó diciendo la comunicadora.
"Todos los padres de chicos con autismo nos sentimos desbordados, nos pasan cosas como a cualquier padre pero más, porque los chicos necesitan más estímulos y tienen otros tiempo. Tenemos los nervios a flor de piel pero el poder reponernos y saber qué hacer es la clave de todo. Los chicos tienen un problema de comunicación y lenguaje y hay que poder descubrir qué los está perturbando en ese momento para ayudarlos", detalló María Julia Oliván.
Además, contó que tiene un proyecto para acompañar a los padres de hijos con autismo: "Estoy haciendo un podcast donde estoy contando mi experiencia, se llama Chat de Mamis. Ayudé por teléfono a muchos padres. Con la plata no solucionas muchas cosas, lo primero es la contención. También te deprimís y dura mucho tiempo, yo recién este año en marzo pude salir de esa depresión para volver a conectarme con mi trabajo".
"A medida que van creciendo se van presentando nuevos problemas. Cada uno lo afronta como puede. Hay que crear una red de contención para los padres", explicó la periodista.
R.L