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Tal como sucedió en octubre de 2009, la verdad sobre la salud de Celeste Cid sigue siendo un misterio. Y es precisamente esa falta de certezas la que ha dado lugar a un sinnúmero de especulaciones que siembran más dudas sobre su presente.
Según trascendió en las últimas horas, la actriz permanece internada en la clínica psiquiátrica Avril desde el lunes pasado debido a un cuadro de “excitación psicomotriz con depresión respiratoria” causado por un exceso de actividad física y un brusco descenso de peso. Sin embargo, otras versiones aseguran que habría sufrido una recaída en la lucha contra sus adicciones.
“Estaba haciendo un régimen muy estricto para su vuelta a la televisión”, explicaron desde la oficina de representaciones de Alejandro Vanelli. Al parecer, Cid estaba decidida a bajar algunos kilos de cara al comienzo de las grabaciones de El Lobo –la tira que protagonizará junto a Gonzalo Heredia y Adrián Navarro durante 2012– y se encontraba embarcada en una estricta dieta de 600 calorías diarias y arduas sesiones de gimnasia. Según su representante, la sobreexigencia física habría hecho estragos en su de por sí frágil estado de salud, provocando que la joven decidiera internarse por sus propios medios al sentir que “no podía controlarse”.
La versión “no oficial”, en tanto, señala que Cid, de 27 años, ha sufrido una recaída en su lucha contra las adicciones, y hasta se llegó a asegurar que se encuentra “incomunicada, sedada y atada” para evitar que se provoque daño a sí misma.
“Celeste está internada, así que es obvio que bien no está. Pero está mejorando y no está atada ni nada de eso que se está diciendo por ahí”, aclaró a PERFIL Emmanuel Horvilleur, su ex pareja y padre de su único hijo. Pero el músico se negó a dar mayores detalles sobre qué fue lo que motivó su internación.
En octubre de 2009, Cid permaneció veinte días en la clínica Fleni. En aquella oportunidad se habló de trastorno bipolar, sobredosis y, finalmente, de alcoholexia, una combinación entre alcoholismo y anorexia. Ya recuperada, la actriz lució con orgullo los kilos de más ganados durante su recuperación y no tuvo pudor en referirse al oscuro momento que había vivido debido a sus adicciones. “Me parece sanador contar que atravesé un momento en el que me perdí, y que fue una decisión sana internarme. La verdad es que viví situaciones de mucho dolor. Los que te ven de afuera suelen pensar que estás viviendo la vida loca. Cuando estás metido pensás que la pasás divino, pero es todo una ilusión”, contó a un conocido semanario.
Durante 2011, estuvo abocada a la filmación de El amigo alemán y a definir su futuro laboral. La semana pasada se dejó fotografiar junto a Heredia en un evento, promocionando así la dupla que protagonizará la novela que se verá en El Trece durante 2012.
