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Por Agustin Gallardo | Publicado en la edición impresa de Diario Perfil
"Quienes creen que el dinero lo hace todo, terminan haciendo todo por dinero", dijo alguna vez Voltaire. Si hay algo que caracteriza a la mayoría de la farándula argentina, tiene un poco que ver con las palabras del filósofo y escritor francés: todo por el vil metal.
En este escenario, "Bailando por un sueño" brinda la mejor cotización para aquellos que están dispuestos a exponerse, aún cuando la jugada pueda resultar por demás riesgosa. Ya lo dijo Agustina Kämpfer la semana pasada: "Ideas del Sur paga muy bien". La periodista hizo referencia a la ex productora de Marcelo Tinelli, desde donde se realiza este tanque mediático cumplidor de sueños, y que hoy está comandada por el empresario Cristóbal López, el eslabón último a la hora de barajar hasta dónde y por quién pagar tal o cual monto.
Desde que "Bailando por un sueño" existe, siempre está en el eje de la polémica cuánto cobran los famosos y, cada año, además de generarse fantasía con sueldos exorbitantes, la firma de contratos llega luego de un tire y afloje entre productores y participantes. "No me parece lo que me ofrecen, ellos saben quién soy. Se trata de sentido común", se quejó ante PERFIL un participante que aún no cerró su contrato pero ya está ensayando.
Sueldos. A semanas de que comience el show, y con la mayoría de las figuras confirmadas, PERFIL consultó varias fuentes ligadas al concurso, incluyendo algunos participantes, quienes aceptaron hablar en off the record. Son las famosas "figuritas difíciles", esas que uno no imagina en ese lugar, como lo suele ser algún político o personaje ajeno a la fauna tinellesca, los que más piden. En ese espacio entra Juana Viale, que cerró su contrato por 200 mil pesos. Por debajo comienza a aparecer el resto. Aquí aparece Nazarena Vélez, quien antes de bailar pidió –y soñó– 200 mil pesos.
Nito Artaza, uno de los políticos confirmados, pidió 100 mil pesos. En su caso, el cachet está destinado íntegramente a donarse en partes iguales: 20 mil pesos a cinco hospitales de Corrientes.
En el techo de los 90 mil, surgen Flor de la V y Carmen Barbieri, dos figuras fuertes del espectáculo. Bajando la escala, está Agustina Kämpfer en 80 mil pesos. A Fernando Burlando y Barbie Franco les ofrecieron 75 mil a cada uno, pero el abogado estaría negociando un cachet superior.
Gisela Bernal, quien alguna vez dio sus primeros pasos en esta pista como la pareja de Flavio Mendoza, hoy goza de una alta reputación mediática gracias al escándalo en la que se ve inmersa junto a su ex pareja, el productor teatral Ariel Diwan. Hoy, los 60 mil pesos que le ofrecieron, son muy bienvenidos en este momento donde, literalmente, no tiene otra cosa.
Verónica Ojeda quiso estar cerca de Flor de la V y Barbieri y pidió 80 mil, aunque tuvo que conformarse con unos –nada despreciables– 60 mil. Ese monto es el que le pagarán a la periodista Marcela Tauro. La lista sigue: en 50 mil se encuentra Barbie Vélez, y un poco más abajo, aparece Gladys Florimonte con 45 mil.
Alberto Samid es una de las incógnitas: según dijo a viva voz, donará todo el dinero a un hospital de La Matanza, y dice que le pidió a Tinelli la abultada suma de 2 millones de dólares en calidad de equipamientos, una cifra que dista años luz del resto de los participantes. En el escalafón más bajo están Fernando Dente y Candela Ruggeri, quienes cobrarán entre 20 y 30 mil pesos por su participación. Después de todo, acá también se paga derecho de piso.
