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Con un look que sorprendió a sus fanáticos, Luis Miguel reapareció en los medios gracias a su actuación en la publicidad de la plataforma online de pedido de comida a domicilio Uber Eats, donde simplemente expresa, mirando a cámara, su deseo de comer un plato de pastas.
El comercial comienza con el cantante, vistiendo un smoking de color blanco, ingresando a una sala repleta de discos de oro y platino, además de un piano. “Esta noche voy a cenar fetuccini con salsa de trufas blancas y queso parmesano”, expresa el artista, que ni bien termina de decir su frase, se le acerca una persona con la bolsa de su pedido, mientras se escucha el efecto de sonido de un timbre.
Con su pedido por delivery encima de su instrumento, el músico hace un remate con una alusión a uno de sus más grandes éxitos para elogiar a la compañía que lo contrató: “Mi incondicional amigo”.
La apariencia del Sol de México fue muy comentada en las redes. En Twitter, su nombre se convirtió en tendencia y muchos usuarios señalaron su aspecto asegurando que quien estaba adelante de cámaras parecía un imitador, o incluso diciendo que “Luis Miguel ya no parece Luis Miguel”.
Algo similar sucedió el año pasado, cuando se presentó en un show en Las Vegas, Estados Unidos. En esa oportunidad, la estrella de 50 años de edad lució una cabellera con canas y tuvo el rostro hinchado, mientras que meses después, debido a una fotografía con una cocinera, se abrió un debate entre sus seguidoras y fanáticas.
L.L.
