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Si hay algo que se lee tanto como la palabra “coronavirus” en las redes sociales, esa expresión es Tiger King. ¿La razón? La famosa mini serie sensación disponible en Netflix, que narra la historia imposible de creer -pero verdadera- de Joe Exotic y el universo “white trash” de la lucha por los derechos de los “big cats”, es decir, los felinos de gran tamaño como los tigres y leones, en Estados Unidos.
La miniserie es la cita obligada de la web, y las redes sociales, y es bastante adictiva gracias a las sospechas (varias) de asesinatos y verdades imposibles de creer. Tal es el éxito que en Estados Unidos que ayer se estrenó The Tiger King and I, un especial para entrevistar a personas reales de ese mundo inexplicable (pero también real) que se convirtieron en estrellas gracias al suceso de la serie.
En el show conducido por Joel McHale (el actor de Community, otra serie que esta teniendo en su reposición un éxito sideral en Netflix), se descubrieron varias verdades que nadie sospechaba. El show debería estar disponible pronto en Netflix en Argentina pero por ahora, para fans, aquí están los hallazgos: El más sorprendente indica que Joe Exotic, alguien que hizo su carrera entre felinos grandes, les tiene pavor. El productor Rick Kirkham, responsable del reality de Joe y su intento de ser una estrella mediática antes de esta docuserie, dijo que Joe de hecho le tenía terror a sus animales y solía posar con tigres que eran ciegos y estaban sedados.
Y que, por ende, no representaban riesgo alguno para él. Entre las revelaciones, Kirkham contó que Joe Exotic le pidió que le filme aceptando cuidar un caballo y que después, con las cámaras apagadas, ordenó la muerte del mismo caballo para que fuera alimento de los felinos de su zoológico privado. La muerte accidental de Travis Maldonado, uno de los dos esposos de Joe, llevó a que Exotic visitara a un shaman para hacer las paces con la pérdida que había sufrido.Jeff Lowe, el millonario que apareció para salvar a Joe y lo echó de su zoológico, introduce en este mundo a James Garretson. Garretson termina siendo uno de los informantes del FBI, es decir, uno de los responsables de la actual condena en prisión que vive Joe Exotic.
En el especial, quedó en claro que Lowe sabe las razones por las que Garretson debía contarle todo al FBI. Garretson había dicho que el FBI lo iba a denunciar por la posesión ilegal de un lémur pero Lowe sostiene que esa es solo la punta del iceberg. Y dejó la pelota picando.La mayor no sorpresa del especial es que todos los que rodearon a Joe Exotic lo desprecian. Mientras Exotic cumple una condena de 22 años en prisión por abuso animal y ser parte de un intento de asesinato, no muchos de sus colegas no quieren volver a verlo en libertad. La mayor parte de ellos hablan de un pésimo trato por parte de Joe y, lo que suele irritarlos más, maltrato para con los animales en cautiverio.
Algunos hasta dijeron en el especial que les gustaría que Joe Exotic muera en la cárcel. Por lo pronto, hasta el presidente Donald Trump ha sido consultado en plena emergencia sanitaria declarada en todo Estados Unidos, por la miniserie Tiger King.
