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La salud de Raúl Rizzo mejora día a día, de a poco. Luego de permanecer casi cuatro meses internado, como consecuencia de haberse contagiado coronavirus, regresó a su hogar. Si bien en principio la enfermedad solo había manifestado síntomas leves, después se complicó y derivó en una neumonía bilateral. Estuvo en terapia intensiva, bajo el efecto de poderosos sedantes e intubado. “No alcanzó con eso y tuvieron que hacerme una traqueotomía”, señaló.
El exintegrante del elenco de Pequeña Victoria (Telefe), en primer lugar, fue hospitalizado en el IMAC (Instituto Médico de Alta Complejidad). Luego de 50 días debió ser trasladado al Centro de Recuperación Nuestra Señora de Luján en Flores sur, en donde estuvo otras 56 noches. “Perdí casi 18 kilos. Tenía las piernas que parecían dos banderas, no me podía parar”, comentó el artista en una entrevista con el diario La Nación.
En ese sentido, Raúl relató que perdió “buena parte de la masa muscular”. “Poco a poco, con el trabajo de kinesiología, kinesiología respiratoria, terapia ocupacional, psiquiatría, fisiatría, fonoaudiología, me recuperé”, añadió. Además, indicó que desde el punto de vista de la oxigenación pulmonar se encuentra bien, aunque quedaron secuelas que posiblemente desaparecerán con el tiempo. “Estoy bien y me siento bien", aseveró.
Las alucinaciones de Raúl Rizzo por los tranquilizantes
“Me daban muchos sedantes y tenía sueños alucinantes, pero yo creía que me pasaba de verdad”, reveló Rizzo al recordar parte de su “estadía” en las instituciones médicas. “Era como vivir en un film de terror con algunos giros humorísticos, porque soñaba que el Covid era un bicho grande, como una langosta con alas amarillas que se metía en la habitación”, confesó.
Luego continuó con la descripción de su pesadilla: “Yo llamaba al enfermero como loco y él venía con una rama en la mano y mataba al Covid con ramazos. Ahora, haciendo un análisis, me doy cuenta de que era mi pelea por vivir, que traducía desde el subconsciente en esa clase de sueños. Y tuve otras alucinaciones también. Eran imágenes muy fuertes".
El actor también rememorò otros sueños, como el de estar en una pizzería que al mismo tiempo era una rampa que daba el ingreso a una cancha. “Subía (por la rampa) y decían que me iban a internar, me ponían en una camilla con un cepillo de dientes y otra cosa más en la boca, que me molestaba terriblemente. Ese era el entubamiento y yo lo traducía así en mi subconsciente”, detalló.
Raúl Rizzo se mostró agradecido con la vida por haberse recuperado de aquel episodio tan traumático. El amor de sus hijos, Laurencia, Anahí, Salvador y Lucas fue lo que lo impulsó a dar batalla y salir adelante. “Estuve muy grave y creo que esa energía, mis ganas de vivir y diosito santo me dieron una mano. Mi habitación estaba llena de fotos de mi familia”, concluyó.
S.G.
