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Jean-Michel Jarre, es para muchos el padrino de la música electrónica. Compositor, intérprete y productor de música, su fama por ser el pionero de la música electrónica trascendió Francia, su país natal, para recorrer todo el mundo. Y ahora, es el turno de Argentina.
El jueves 22 de marzo Jarre desembarca en el Luna Park con el Electronica Tour 2018. Para anticiparnos su show, contarnos sobre sus próximas presentaciones, y su gestión como presidente de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores; Jarre tuvo un mano a mano con Exitoina.
– ¿Cuál fue el motivo que te impidió venir antes a Latinoamérica? Aunque sabemos que en 1991 estuviste a punto ir a México para un recital por el eclipse de sol de aquel año.
– Jarre: El concierto del eclipse que se iba a dar entre la pirámide de sol y de luna en Teotihuacan se canceló. En un comienzo todo estaba bien, pero luego México no pudo cumplir con los tiempos acordados y la verdad es que el sol no puede esperar. Para mí siempre fue muy importante tocar en Sudamérica. No pudo ser antes por diferentes compromisos como lo fue en China, Estados Unidos o Rusia. Es muy especial para mí y para ustedes en términos de música, el show, por el tipo de ciudad, los escenarios. Estoy realmente muy contento de comenzar con esta serie de conciertos en Argentina el 22 de marzo.
– Hubo un cambio de sede de GEBA al Luna Park para tu show. ¿Eso afectó en algo tu esquema inicial de ingeniería de sonido y de multimedia?
La verdad que estoy muy feliz por el cambio porque GEBA no era el lugar para mí. Desde un comienzo quise el Luna Park, por lo que me puse muy contento con la noticia del cambio. Ya sea en cuestiones de escenario, en saber lo que podemos hacer, yo tenía más expectativas en el Luna Park que en GEBA.
–En tu adolescencia tuviste una banda llamada The Dustbins, donde eras la voz y la guitarra principal. ¿Qué pasó para que dieras ese giro hacia la electrónica y te transformaras en uno de sus referentes más grandes?
–Siempre fui un gran fan del rock. Tuve esa banda cuando era adolescente, pero me encantaba probar el proceso del sonido, cambiar el sonido de mi guitarra, y cuando descubrí que había una escuela en París, la única en el mundo donde enseñaban a crear música no sólo con notas sino también basadas en sonidos y ruidos, fui hacia esa dirección. Vendí mi guitarra y me fui a Londres para comprar mi primer sintetizador.
–Culturalmente, la conexión entre Francia y Argentina es muy grande. Desde Carlos Gardel, Astor Piazzolla, Mercedes Sosa, Atuhualpa Yupanqui, Raúl Barboza hasta Jairo, que en su mayoría arribaron a Francia huyendo de la dictadura. ¿Cuánto conocés de ellos y de su arte?
Carlos Gardel es una leyenda, de hecho me recuerda a mi madre (France Pejot) que le encantaba. Astor Piazzola ha sido importante en mi mundo, tuvo sentido cuando era estudiante, revolucionó el tango, realmente único. Es atemporal. Sabés, lo que me interesa de la música es ese mix de alegría, disfrute, tristeza y melancolía y eso es maravilloso en Astor Piazzola. Esos estados me encantan. Astor Piazzola hizo tango no sólo para los argentinos sino que es universal. He seguido todo lo que sucedió en el régimen militar de tu país. Argentina es un lugar con la costumbre de grandes reuniones, grandes vinos, y con una historia de tiempos políticos y sociales que fueron muy difíciles. Como vos dijiste, hubo una gran conexión entre mi país y Argentina.
–¿Qué sigue después de tu paso por Argentina y Chile?
Después de los shows en Argentina y Chile voy a pasar dos días en México, para luego iniciar mi tour en los Estados Unidos: Texas, Dallas, Houston, Coachella el 13 y 20 de abril, Vancouver, Seattle y San Diego.
– ¿Qué nos podés contar de tu gestión como presidente de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC)?
Es muy importante para mí ser presidente de CISAC, Marcelo Piñeyro es el vicepresidente y director. La CISAC representa a los artistas en el mundo, tanto en Argentina como en Francia y en todas partes estamos enfrentando el problema que significa no ajustarse al futuro de las industrias. Tenemos que encontrar la forma de que nos paguen regalías por derecho de autor, por nuestras creaciones, teniendo en cuenta una industria que ha alcanzado altos niveles de riqueza, y de la cual no hemos recibido nada. Para mí es una felicidad y un honor promover el sentido de la importancia de los derechos de los artistas argentinos, y de todos los artistas del mundo.
– ¿La vuelta del formato vinilo es una moda o ha llegado para quedarse definitivamente y qué implicancia tiene su reaparición en las acciones desplegadas por la CISAC?
Es una pregunta realmente interesante, es una cuestión ligada a la lucha en la CISAC. La CISAC está promoviendo los derechos de los creadores y a comprar de la forma que se compraba antes. El disco en vinilo es de un gran valor, es un signo del valor de la música, de la artística, de tocar la tapa y observar la técnica creada para el vinilo. En consecuencia la lucha de CISAC tiene que ver con que hoy no se aprecia el valor del trabajo del vinilo. Y es más, mi próximo proyecto es sacar mi discografía en vinilo, CD y cassette, porque creo que el cassette es un soporte muy interesante. Lo interesante hoy día es que se puede utilizar cualquier formato y eso es lo valioso a la hora de promover nuestra música.
– De todos tus recitales considero que el más interesante fue el que diste en China 1981, con plena guerra fría como contexto político. ¿Cómo fueron las gestiones para llegar a esas instancias y transformarte en el primer músico occidental en tocar en la República Popular China?
Toqué en 1981 luego de la era Mao, en donde hubo una revolución en el tipo de concepto del video, de la música con sintetizadores, en la idea, el sueño, de tocar en la luna o incluso en diferentes planetas. Para mí fue un shock, un shock positivo, porque en esos días la gente no tenía nada más que música china. Es algo que fue más allá de la política, no hay que boicotear el país que tenga problemas políticos no yendo, porque creo que, como artista, la comunicación tiene que ser con el público, que no es responsable de la situación en el país. China decidió por aquellos días abrir las puertas a algunos artistas, y yo fui el elegido. Luego cerraron las puertas por dos años. Eso es China, ellos se manejan así.
– ¿Qué hay de cierto sobre que, en aquel concierto que diste en 1979, en la Plaza de la Concordia en Paris, los Rolling Stones estuvieron presentes y se mostraron fascinados con tu música?
Fue un concierto al que fueron un millón de personas, algo que me sorprendió, me shokeó. En París fue la primera vez que se usaron las luces de los edificios y los alrededores para hacer un concierto al aire libre. Luces que se usaron como parte del diseño de luces para el escenario. Varios artistas me han visto incluido los Rolling Stones y Mick Jagger estuvo allí y dijo en confianza después del show: “Nunca había visto algo así en mi vida”, esto sentó algún precedente de como otros músicos en años siguientes presentaron su música. Como sabemos los Rolling Stones, U2, Coldplay, entre otros, y en festivales se usa el concepto de diseño de grandes escenarios.
Agradecimiento (traducción): Patricia Galleri