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Un fan indignado de Madonna demandó a la Reina del Pop, de 65 años, porque según él, fue engañado para que comprar entradas para un concierto en el que se exhibía "pornografía sin previo aviso".
Por qué fue demandada Madonna
The Blast informó que Justen Lipeles presentó la demanda colectiva en nombre de los demás asistentes a uno de los espectáculos de la gira Celebration Tour de Madonna en Inglewood, California.
Lipeles acusó a Madonna y a Live Nation, matriz de Ticketmaster, de seis delitos: "incumplimiento de contrato escrito, tergiversación negligente, imposición intencionada de angustia emocional, publicidad falsa, negligencia/imposición negligente de angustia emocional y competencia desleal".
Primero, el hombre asegura que el show del 7 de marzo en el Kia Forum empezó con una hora y media de retraso, y que en el recinto hacía un calor abrasador porque Madonna supuestamente exigió que se apagara el aire acondicionado. En la demanda, Lipeles dice que él y otros fans sudaban profusamente y se sentían mal físicamente debido al calor, pero al parecer esto no preocupó a Madonna, que supuestamente dijo al público que se quitaran la ropa si tenían calor.
Lipeles afirma que él y otros asistentes al concierto se vieron "obligados a ver en el escenario a mujeres en topless simulando actos sexuales". "Obligar a los consumidores a esperar horas en recintos incómodos y calurosos y someterlos a pornografía sin previo aviso es demostrativo de la despreocupación de Madonna por sus fans", argumentó, y afirmó haber sentido que veía una película porno.
Madonna, por otro lado, se enfrenta a dos demandas colectivas por sus constantes retrasos, y ambos grupos de demandantes alegan que la estrella llegaba horas tarde a sus actuaciones programadas. Las presentaciones se refieren al "total falta de respeto" y la tendencia de La Reina del Pop a hacer playback durante gran parte del espectáculo.
El sitio indica que la artista presentó una moción para desestimar una de estas demandas en abril, argumentando que era ilógico que los fans esperaran que empezara a la hora. "Ningún espectador razonable, y desde luego ningún fan de Madonna, esperaría que la cabeza de cartel de un gran concierto saliera al escenario a la hora prevista", dice la demanda.
