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Clemente Zavaleta sufrió un grave accidente el pasado jueves 17 de marzo mientras jugaba al polo en Los Estados Unidos. Su mujer, Isabelle Strom, está junto a él desde el primer momento y en las última horas le dedicó un sentido mensaje.
Mediante la cuenta oficial de Instagram que comparte con Clemente, Isabelle subió una romántica fotografía y pidió: "Volvé y haceme sonreír de nuevo". Días atrás, la mujer de 33 años también apareció en la red y dejó un mensaje que decía: "Querida familia y amigos, muchas gracias por el apoyo y la ayuda. Clemente los necesita. Nosotros sentimos sus oraciones. Tenemos que estar fuertes".
Quién es Isabelle Strom, la mujer de Clemente Zavaleta
Isabelle Strom, además de ser la madre de las dos hijas de Clemente Zavaleta, es amazona profesional (así se le dice a las mujeres que montan caballos). También es la heredera francesa de la fortuna de Birger Strom, su padre fallecido el año pasado, y quien fue el líder de Saint Mesme, una importante organización de polo en Francia.
Isabelle se casó con Clemente en dos oportunidades. Primero, el 17 de diciembre de 2013 en Argentina y luego, en julio de 2014 en París, Francia. Al día de hoy, Zavaleta y Strom son padres de dos niñas: Olympia y Assia Eugenie.
Qué le pasó a Clemente Zavaleta
El 17 de marzo, el hijo de la trilliza María Emilia sufrió un accidente mientras disputaba un partido de polo en Palm Beach, Estados Unidos. Clemente fue embestido por otro jugador y, junto con su caballo, cayó al piso. Esto provocó que se le generara un coágulo y una lesión en el tronco de la cabeza, además de varias costillas fracturadas y una perforación en el pulmón.
María Emilia viajó a los Estados Unidos para estar cerca de su hijo y mediante las redes sociales le dedicó emotivos mensajes de aliento: "¡Quiero que me abraces otra vez! ¡Sos un guerrero y lo vas a lograr! Fuerza". Además, desde la cuenta que María Emilia comparte con sus hermanas, agradecieron: "Gracias por los miles de mensajes que nos llegan por todas las vías de contacto. El amor y la buena energía se sienten y mucho. La fe, junto al amor, son las fuerzas más potentes del mundo. Y sin importar la religión que se practique o crea: ayudan, sanan y hacen milagros. Sigamos rezando, cada cual a su Dios, por el Corchito. Gracias a todos".
R.L
