martes 03 de diciembre del 2024
Su relato 09-02-2019 17:25

La lucha de Valentina Bassi por la salud de su hijo

La actriz contó por qué decidió darle aceite de cannabis a su hijo Lisandro, de 10 años. Mirá el video.

valentina bassi_lisandro
La actriz y una lucha incansable. | Instagram

Días atrás, la actriz Valentina Bassi contó en su cuenta de Instagram que cultiva cannabis y produce aceite medicinal para su hijo, Lisandro, de 10 años, quien se encuentra dentro del espectro autista.

“Con esta planta hago aceite medicinal para mi hijo. No quiero ser ilegal, me molesta mucho hacer todo a escondidas. Tengo muchas preguntas, no soy médica, necesito y espero con ansiedad estudios científicos que me ayuden a encontrar la dosis y la cepa indicada. ¿Mientras tanto? no puedo esperar”, escribió en Bassi el pasado 22 de enero junto a una foto donde se la ve al lado de una planta de marihuana.

El viernes, invitada al ciclo Confrontados (El Nueve), la actriz habló de la lucha que atraviesa para mejorar la calidad de vida de su hijo, fruto de su relación con el director de cine Ulises Rosell, y que se encuentra dentro del espectro autista. Según explicó, el aceite de cannabis que produce ayudó a Lisandro a mejorar su estado y a conciliar el sueño.

Para mí fue como una salvación, hace tres años que cultivo para hacer aceite para mi hijo. Le doy específicamente para trastorno del sueño, porque lo tenía muy grave. Probamos de todo, homeopatía, fuimos al mejor pediatra, flores de Bach, melatonina… y tuvimos que caer en un psicofármaco, que no le quiero dar bajo ningún punto, porque mi hijito no dormía. Con eso se estabilizó un poco pero a los tres meses hubo que aumentarle la dosis y dije ‘basta, hasta acá llegué’”, relató Bassi.

La actriz contó que, tres años atrás, la neuróloga de su hijo le dijo que si bien no podía hacerle ninguna receta ni ella podía cultivar porque era ilegal, muchas madres” llevaban a sus hijos a su consultorio y estaban mucho mejor” debido al consumo de aceite de cannabis.

“Ella me conectó con una mamá y a partir de ahí empecé a cultivar y a hacer los aceites. Logré una mejoría. No le saqué todavía el psicofármaco, pero lo bajé a la mínima dosis en vez de aumentarla. Hasta ahora logré un efecto complementario”, detalló.

Sobre si ella produce su propio aceite, dijo: "Prefiero hacerlo yo, porque al ser ilegal yo no sé qué me van a vender. Entonces estoy muy segura que lo que le estoy dando a mi hijo no tiene pesticidas y mejor calidad no puede tener porque lo hace la madre". Y agregó sobre la ley: "Hay una ley, se aceptó que es medicinal. La ley está pésimamente reglamentada, nada de lo que dice la ley se hizo pero es un avance, se empieza a ver al cannabis como algo medicinal".

Por último, consultada sobre el estado actual de su hijo, dijo: “Mi hijo es un divino, él hace sus terapias. El problema grave realmente era que no podía dormir. Ahí no estaba nadie sano de la familia, la familia entera no duerme. Fue un par de años de mucha tristeza. Hoy está perfecto, es feliz, que es lo único que me importa. Yo también estoy más tranquila. Puedo trabajar mejor, en un momento me retraje mucho de mi vida laboral porque estaba muy preocupada”, cerró.

En marzo de 2017, el Congreso convirtió en ley el uso medicinal del cannabis. Sin embargo, además de otras complicaciones en la reglamentación, el Programa Nacional para el Estudio y la Investigación del Uso Medicinal de la Planta de Cannabis contempla sólo a pacientes con epilepsia refractaria. Pacientes y familiares reclaman que se amplíe la ley a males como la esclerosis múltiple, artritis, VIH, fibromialgia y Alzheimer y que se autorice el autocultivo.

L.M

En esta Nota