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Guillermo Coppola se encontraba al aire en La 100 cuando Guido Kazcka le comunicó que era oficial la muerte de Diego Maradona, su amigo, su hermano. El exmánager de El Diez no pudo contener las lágrimas y estalló en llanto.
"Veo las lágrimas de Guillermo Andino. No creyendo. Me cuesta. No podía creer. El mundo, el teléfono no para de sonar y, una noticia que no puedo creer. Una vida juntos", se escuchó decir a Coppola totalmente quebrado en pleno vivo de "No está todo dicho" en la 100, ciclo del que forma parte.
Cuando el conductor, Guido Kazcka, quien llamó "mito argentino" a Maradona, comentó que Claudia "Gunda" Fontán también estaba llorando, el exrepresentante del astro del fútbol agregó: "Es que no se puede creer".
"Hay algo que se nos está muriendo adentro, porque nosotros somos Maradona. Cada uno de nosotros tenemos una parte de Maradona adentro", comentó Guido.
"Guardar los buenos recuerdos, y recién cuando hablábamos... te veía en Coconor a vos de chiquito. Siempre era alegre, feliz... Yo prefiero a ese Diego, ese Diego que nos divertimos... Que la pasamos bien, que lloramos, que sufrimos... ¿Viste la cuerda? La cuerda, la cuerda... y un día se rompe. Un día se rompe tirar mucho triar de la cuerda, mucho tirar de la cuerda, Dieguito...", se lamentó Guillote acongojado.
En su testimonio, añadió: "Estoy destrozado, destruido... Me imagino cómo estarán sus hijos, sus hermanas, sus hermanos. No quiero ni pensar. Prefiero no creerlo y pensar que es un sueño".
"Va a estar siempre en nuestros corazones. Con las diferencias que podíamos tener, con sus rebeldías, pero en el fondo... como digo siempre, hay 100 que están hablando mal y uno entraba y preguntaba y 99 cambiaban inmediatamente el sentir, la opinión. Algo tenía a su alrededor que lo protegía, que lo cubría. Y bueno. hoy le dijeron 'vení' y allá va, Dieguito...", concluyó absolutamente quebrado.
Uno de los últimos encuentros de Diego y Guillote fue en marzo, cuando Maradona fue a la Bombonera como Director Técnico de Gimnasia y Esgrima de La Plata. Coppola, al verlo, le tiró besos desde su palco, además de expresarle todo su amor.
Semanas atrás, Guillermo había hablado del delicado estado de salud de El Diez: "La última vez que lo vi en la cancha me hizo gesto de que lo llame, lo hice y nadie me atendió. En mi época no le tocabas el teléfono, de esto hace 16 años ya, pero aparentemente ahora es diferente". Y remarcó: "En su momento lo vi triste, pasamos momentos de total soledad, pero nunca lo vi con un cuadro como el que dicen ahora. Todos vimos que Diego no estaba bien el viernes", comentó.
Tras la última internación de Diego, Guillermo Cóppola consideró que "Maradona necesita de un scrum familiar con Dalma y Giannina a la cabeza para que tomen las riendas. Con (sus otros hijos) Jana (24) y Diego Junior (34) también. Los que lo aman de verdad".
Manejar el dinero y negocios de Maradona no fue una misión sencilla para sus apoderados. Con Guillote, su hermano, no fue distinto, con quien arrancó su historia en 1985, tras la salida de Jorge Cyterszpiller, con quien también terminó en malos términos.
Si bien no atravesaba necesidades económicas, su herencia dista bastante de aquellos años de fortunas que le dio su trayectoria. En más de una ocasión Diego se quejó de las malas administraciones de sus representantes.
"Estoy 'muerto' (dolido) porque le di mi vida a Guillermo y me equivoqué. Se quedó con mucha plata mía y no lo voy a permitir. Él, que tiene este dinero, se lo deberá devolver a mis gordas (sus hijas, Dalma y Giannina). Le di un poder a alguien que creía mi amigo y no me respondió como me había prometido", expresó una vez sobre Coppola.
Maradona le reclamó millones de dólares por diversos ingresos, y aseguró que Guillermo le había mentido por años. La relación se interrumpió entre 1990 y 1995 cuando el exDT contrató al empresario futbolístico Juan Marcos Franchi.
Se distanciaron por años, pero Guillermo jamás dejó de manifestar su amor por Diego. Su reencuentro llegó en 2015, con el fallecimiento de Don Diego, el padre de Maradona. De un lado del féretro estaba Diego y del otro Guillermo. Tras la despedida al hombre que dio vida a El Diez en el Jardín de Paz de Bella Vista, donde también reposa el cuerpo de Doña Tota, se fundieron en un abrazo.
“Hacía tanto tiempo que no nos abrazamos. Era el abrazo pendiente, el cierre de una película que no se sabía dónde se iba a terminar", aseguró sobre el reencuentro. "Repasamos delante de la imagen de Don Diego, la película de nuestras vidas. Fue tan emocionante, tan emotivo, en la mayoría de mis historias está Diego y Don Diego", concluyó.
En medio de este contexto, se reveló cuál fue la reacción de Rocío Oliva al enterarse de la noticia, y cuál es el temor de Dalma y Gianinna tras la muerte de Diego Maradona.
L.M