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La lucha cotidiana por igualar los derechos del hombre y la mujer en Argentina se define como un escenario reñido de luchas, manifestaciones en las redes sociales, en el Congreso y un sinfín de reclamos, que buscan torcer el brazo de una sociedad patriarcal, a una en la que se respete más el lugar de la mujer. En este marco, la ex modelo y artista, Naomi Preizler, recordó un momento de su relación con Joaquín Furriel, con quien estuvo hace más de cuatro años, y viéndolo en perspectiva lo analizó indignada.
“Les voy a contar algo re cholulo e íntimo pero lo amerita”, lanzó junto a un exótico vestuario en un video y añadió: “Cuando salía con Joaquín Furriel, él no quería que use tacos cuando salíamos juntos porque lo pasaba en altura ¿what the fuck man? (¿qué carajos hombre?)".
En esa misma línea, Preizler, que realizó viajes con Furriel, compartió actividades y se mostraron muy felices durante un tiempo, reflexionó: “Me pongo a pensar ¿por qué las mujeres altas se sienten mal y los hombres altos están ok?, ¿por qué las mujeres siempre tienen que ser más bajas que los hombres? Es como si a ellos no les gustara que la mujer sea más alta porque se sienten menos. Es algo re patriarcal y que sucede mucho en Argentina”. En ese sentido comparó la situación local con la de Estados Unidos y aseguró que en el país liderado por Donald Trump, que las mujeres sean más altas que los hombres está re aceptado.
Tras sacar “trapitos al sol” de aquella situación que, hoy con un cambio de contexto, piensa exhaustivamente y la indigna, Naomi indicó en un video que grabó para la red social Tik Tok que siempre la acomplejó su altura (1.75) y abrió su corazón al contar que por ella recibió mucho bullying cuando era más chica.
“Se que es un montón para la vida normal pero no para modelo. De hecho, era de las más bajas”, puntualizó y confesó: “Me decían que era un monstruo porque era demasiado alta. Me hacían mucho bullying y sigo siendo un monstruo pero le saqué rédito económico a ser tan alta. La verdad es que las altas la pasamos muy mal, porque le llevamos dos cabezas a todos los varoncitos y ningún varón nos da pelota. A mi ninguno me daba bola”.
Luego expuso en un detallado relato las desafortunadas frases que le dedicaban por su medida. “Me decían 'jirafa', 'larga al pedo', 'larguirucha', me decían que nunca me iba a casar porque era muy alta y me iban a tener que cortar las piernas para entrar en la cama. Mi papá por eso me decía 'deciles inspectores de zócalos', 'hobbits', cualquiera. Después de grande, a la altura la disfrutás un poco más y no hay que desesperarse”.
En ese punto, aconsejó a todas las que pasan por el mismo caso que ella: “No te encorves. Yo me encorvaba mucho. Hay que llevarla con orgullo. Cuando me sentía mal miraba a Nicole Kidman en su época cuando salía con Tom Cruise y me sentía un poco más empoderada, porque ella es una bomba y era mi ídola. Idolatraba a altas para sentirme mejor”.
A.A