El dolor de Mirtha Legrand: "Mojo mi almohada llorando por Goldy"

En su gran regreso a la televisión, Mirtha Legrand recordó a Goldy, su hermana, quien falleció el 1 de mayo de este año, y expresó toda la tristeza que siente tras su desaparición física. 

Silvia "Goldy" Legrand -María Aurelia Paula Martínez Suárez su nombre real-, actriz y hermana gemela de Mirtha Legrand, falleció el 1 de mayo a los 93 años, a causa de un infarto mientras dormía la siesta en su casa de Olivos, provincia de Buenos Aires.

En medio de la lucha con los efectos psicológicos de un confinamiento que parecía eterno, Mirtha se encontró con una pérdida inesperada e irreparable, la de su querida hermana, Goldy, su otra mitad, la cabeza detrás de los clásicos de la diva. Previamente, había sufrido la muerte de su hermano mayor, José Antonio Martínez Suárez, Josecito, quien falleció el 17 de agosto de 2019, a los 93 años.

"Si me permiten, voy a dedicar este programa de hoy a una persona que se fue hace unos meses: mi amada y querida hermana Goldy. Para ella, este programa de hoy y todo mi amor", expresó La Chiqui, en su regreso a La Noche de Mirtha (ElTrece). "La extraño y la sigo queriendo. Es parte de mi vida y me cuesta pensar que ya no está entre nosotros. Goldy, donde estés, este beso es para vos", concluyó Mirtha, mientras su nieta Juana Viale la tomaba de sus manos.

Más tarde, ya en la mesa, y ante la consulta de Juana, Mirtha se explayó sobre el dolor que le ha causado la muerte de su hermana, y contó cómo atravesó la devastadora pérdida.

"La muerte de Goldy fue terrible para mí, es terrible para mí. Ahora me he dado cuenta que es la mitad de mi vida. Mi hermama, mi gemela, toda la vida juntas", dijo La Chiqui. "Nacimos juntas prácticamente, porque cuando yo nací mi mamá no sabía que tenía gemelas. Y cuando nació tía Goldy, que nació primera, la partera le dijo -a su madre- 'Doña Rosa, otro esfuerzo que viene otra', y la otra era yo. Nací con un kilo trescientos, por eso lo de Chiquita y Goldy por 'gordita'", detalló.

Luego rememoró: “Vos sabés que mi papá, don José, que era andaluz, un hombre muy buen mozo y espléndido, nos sentaba a cada una en una rodilla. Y preguntaba: ‘¿Quién es, mi Chiquita o mi Gordita?’ No nos reconocía”, señaló. 

"La partida de ella fue terrible. Ella murió de muerte súbita, no se dio cuenta", explicó Mirtha mirando hacia abajo, dolida. "Yo había hablado con ella la noche anterior", añadió.

"Era todo para mí. La persona que me informaba de todo. No salía de su casa pero sabía todo. Una mujer muy informada, lectora. No salía de su casa pero sabía todo lo que ocurría en la Argentina. Los nombres de cada uno.Todo el mundo la adoraba, todo el mundo. Y no pude despedirla, ¿te das cuenta? No pude despedirla porque murió en plena pandemia", lamentó. "Ahora voy a ir a llevarle unas flores”, dijo Mirtha angustiada.

Después, reconoció: “Hay días... Hay noches que me despierto llorando. Eso de mojar la almohada con lágrimas...Yo mojo mi almohada llorando por ella. Porque la extraño tanto, tanto. ¡No quiero que se haya muerto ¡No quiero!", exclamó, a la vez que le envió saludos a su familia, de Goldy y las hijas de José.

"He tendido pérdidas muy terribles, muy terribles, últimamente, que me han hecho mucho daño. Pero saco fuerzas no sé de dónde”, dijo entonces Mirtha. Juana le recordó que había sacado fuerzas cuando murió su marido, Daniel Tinayre, en 1994, y su hijo Daniel, en 1999. “En ese momento trabajaba mucho, hacía el programa diario”, recordó la conductora.

L.M