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Durante el pase con Luis Novaresio, la conductora de A24, Viviana Canosa, estalló de furia tras escuchar la nuevas serie de restricciones a la actividad comercial y la circulación anunciadas por el presidente Alberto Fernández, con el objetivo de frenar la segunda ola de coronavirus, y advirtió una posible "rebelión" de los argentinos.
"Yo no quiero un estado policial ni un estado buchón. No quiero denunciar a mi vecino ni que mi vecino me denuncie. Yo decido si quiero ir a comer pero no quiero que al tipo que tiene un restaurante le digan lo que tiene que hacer porque el tipo se rompió el alma, está endeudado, perdió un año de su vida, no dan más. No se ponen en el lugar de esa gente, yo sí me pongo", dijo Viviana Canosa elevando la voz, notablemente enojada. Y agregó: "Y si quiero salir a las once de la noche, tengo todo el derecho de hacerlo".
"No pudieron dar el ejemplo con la salud de la gente, con el Vacunatorio VIP, explicame las vacunas que fueron a El Calafate. Somos una manga de boludos los argentinos, nos cansamos. Hicimos todo, nos guardamos y no les importó nada. Si ustedes no pueden justificar eso a esta población, nos vamos a rebelar", exclamó la conductora de A24 a Rosario Ayerdi, una de las periodistas del ciclo de Novaresio, además de aclarar que ella no dejará de abrazara a sus padres "un solo día de mi vida porque ya lo hice y no lo volveré a hacer".
"Alberto Fernández y todos los políticos no nos cuidaron, nos robaron las vacunas. ¿Desde qué moral me vienen a hablar? Yo defiendo a la gente, me saca. Le pongo pasión porque ellos le ponen desidia", indicó acaloradamente. Y añadió: "Me irrita que al laburante que no puede más le digan que se terminó y que a las doce no puede salir más".
Viviana Canosa se cruzó con Luis Novaresio y Nacho Ortelli en A24
Minutos después, la conductora de Viviana con Vos se cruzó con el periodista Ignacio Ortelli, quien la cuestionó por su elevado tono de voz: "Estoy en un medio y tengo que comunicar con responsabilidad, incluso controlando mis pasiones". "Yo me siento responsable con mis pasiones, tampoco voy a pedir permiso por ser apasionada. Le pongo más ovario que muchos en los medios de comunicación", respondió Canosa y amenazó con dar por terminado el pase entre los programas.
Mientras el penalista de Dicho Esto intentaba presentar su idea sobre el tema, Viviana lo interrumpió: "Voy a leer mensajes de la gente así no le pongo pasión y le pongo tibieza a esto. Ustedes hablen", tiró chicanera. Pero lejos de quedarse callada, cuando Ortelli preguntó si había otra forma de controlar el coronavirus. “¡Hay que poner huevos como ciudadanos!“. Por otro lado, también pidió que se esclarezca el tema de los desaparecidos en democracia del año pasado, entre otras denuncias contra el Gobierno.
En ese momento, Novaresio intentó bajar la intensidad de la discusión, pero Canosa arremetió: "¡Me estás subestimando! Yo pienso pero con euforia. Qué dijo el Presidente. Nada dijo. Entonces yo no me voy a resignar a que me saquen mis libertades individuales. Y no hablo por mí, hablo por la gente que no tiene voz". "Se calentó Canosa", comentó Novaresio en tono de broma.
Una vez que terminó su efervescente exposición, Canosa bajó el tono pero mantuvo sus dichos. "Yo lo digo desde un lugar de privilegiada. Lo que no hacen los políticos yo lo quiero hacer como comunicadora. A diferencia de los políticos, esta silla no necesito calentarla aunque el laburo no me sobre. Prefiero perder un laburo con dignidad tratando de defender al pueblo, que no he defendido por los gobernantes de turno, que mientras dicen que lo más importante es vacunar, está jugando River Plate en un ratito y los tipos hoy casi, si no fuera por la presión de los medios, no vacunan a los viejos que fueron a vacunarse".
"Yo esa Argentina no la quiero, ni para mí ni para ninguna persona de bien de este país. Estoy siempre del lado de los buenos. Soy una mujer apasionada, eso es aries, eso soy yo, hasta acá llegué y por algo habrá sido", concluyó fulminante Viviana Canosa.
Alberto Fernández anunció medidas por la segunda ola del Coronavirus
El Gobierno estableció una nueva serie de restricciones a la actividad comercial y la circulación con el objetivo de frenar la segunda ola de coronavirus, que hoy marcó un nuevo récord de contagios, con 22.039 casos, el número más alto desde el comienzo de la pandemia. Las medidas regirán hasta el 30 de abril, con el objetivo de ganar tiempo para avanzar en la campaña de vacunación.
"Hemos entrado en la segunda ola. Las próximas tres semanas son muy importantes", dijo el presidente, Alberto Fernández, en un mensaje difundido desde su aislamiento en la residencia oficial. "La pandemia continúa, está volviendo con más rigor. Solo en los últimos 7 días, los casos aumentaron un 36% en todo el territorio y un 56% solo en el Amba (Buenos Aires y alrededores)", explicó Fernández, quien días atrás, luego de haber recibido las dos dosis de la vacuna Sputnik V, dio positivo de coronavirus.
En las áreas de mayor riesgo, que incluyen a la Ciudad de Buenos Aires y el área metropolitana a su alrededor, no se podrá circular entre la medianoche y las seis de la mañana, a partir de las 00.00 horas del viernes, en tanto bares y restaurantes deberán cerrar a las 23.00.
No se podrán organizar reuniones sociales en espacios públicos al aire libre con más de 20 personas, y permanecerán cerrados discotecas, casinos y salones de fiestas. También se suspenden actividades sociales en domicilios particulares y las prácticas de deportes en lugares cerrados con la participación de más de diez personas.
Pese a las polémicas de los últimos días, se estableció que no habrá modificaciones para las escuelas y para las industrias, con medidas que el gobierno presenta como "transitorias, tempranas y localizadas". En materia de transporte público, tal como ocurrió a comienzos del año pasado, el objetivo es que solo sea utilizado por el personal esencial y los alumnos o docentes, ya que no se suspenderán las clases presenciales. Para poder trasladarse, las personas que estén habilitadas deberán gestionar un nuevo permiso de circulación mediante una app dispuesta por el gobierno.
L.M