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Su nombre es Juan Roccabruna. Era recepcionista de Ruben Mühlberger y tras desatarse el escandaloso caso que tackleó de frente al doctor por haberse encontrado irregularidades varias en su clínica de salud estética, tal como la falta de habilitación del centro y medicamentos vencidos, entre otras, el joven se presentó en más de una oportunidad en Intrusos (América) y recorrió los medios para dar su testimonio en primera persona de la "locura" que vivió trabajando para el imputado.
Mientras el dueño del centro en el que se atendían centenares de figuras de la farándula y la política se encuentra en prisión domiciliaria y siendo investigado, quienes trabajaban para él buscan un nuevo futuro, librado de los conflictos que venían emparentados con él. Este el caso de Roccabruna, quien en medio de un ping pong de pregunta-respuesta con sus seguidores confesó que le gustaría ser parte de Showmatch.
"¿Cómo quedaste con el tema laboral?", indagó un seguidor al que Juan le contestó sin vueltas acercando su boca a la cámara: "Sin trabajo". Desde ese punto, muchos comenzaron a consultarle cómo le hacía frente a los comentarios en contra de su sexualidad a modo de 'escarnio' por sus declaraciones y aparición en TV, y aseguró: "Las maricas estamos acostumbradas a manejar el odio, comentarios y las opiniones, así que lo llevo bien".
Fue allí entonces que la gente le consultó sobre posibles ofertas laborales, y él bromeando lanzó que le ofrecieron "ser tira cables". Finalmente le preguntaron si aceptaría ir al Bailando. "Por supuesto, porque sería muy importante que haya una marica respaldando la voz de muchos que no la tienen", lanzó contundente, con la esperanza de que Marcelo Tinelli le de una oportunidad. ¿Lo veremos en la pista?
A.A
