Revelaron que Mauro Icardi podría demandar a Wanda Nara por hostigamiento

Guido Záffora reveló que la reciente entrevista de Wanda Nara con Grego Rossello no le habría gustado a Mauro Icardi, y estaría evaluando hacerle una nueva denuncia por hostigamiento.

¿Qué se sabe de la posible denuncia de Mauro Icardi a Wanda Nara?

"Empezamos la semana con todo. Aparentemente Icardi junto a sus abogadas esta evaluando denunciar por la nota de Wanda Nara con Grego Rossello", comenzó Mariana Fabbiani en DDM y su panelista sumó: "Esto acaba de pasar, porque hoy sus abogadas le pasaron los textuales polémicos de Wanda Nara y estaría a punto de denunciarla por hostigamiento, por todo lo que estaría diciendo en los últimos tiempos, con respecto a su relación y su genitalidad".

"La frase más polémica que le molesto fue el tema de que no tiene amigos y lo que entiende de la genitalidad", continuó Guido Záffora sobre Mauro Icardi y Wanda Nara, y cerró: "Wanda se portó de una manera no cordial al dar una entrevista para ElTrece, porque Wanda no avisó. Por eso el canal le pide la entrevista con Grego".

¿Qué contó Wanda Nara sobre la cita con un famoso?

Wanda reveló en Ferné con Grego (Stream Telefe) que todo su entorno siempre estuvo en contra de su relación con L-Gante y un día se animaron a arreglarle una cita con un famoso -después de separarse del cantante- que ella terminó aceptando.

Wanda contó algunos detalles del encuentro: "Entró por la cochera, trajo dos vinos que los apoya en la entrada. Yo estaba con la peor de las ondas. Estaba totalmente negada". Y avanzó con el relato: "Yo estaba en jogging, descalza, despeinada, desmaquillada. El tipo me empezó a tocar el pie, pero no había manera de arrancar la situación".

"En un momento me dice: 'Estoy hace tres horas hablando, me contaste de todo y no me ofreciste nada para tomar'. Le digo: 'Allá a la izquierda está la cocina, mi empleada duerme, no tengo ni idea de dónde están las tazas, busca y hace lo que quieras'", contó Wanda. Luego relató que el galán volvió de la cocina con dos tes que sirvió en unas tazas floreadas que nunca se usan y que fueron el final de la cita: "Mañana me levantó re temprano, tengo un vuelo otro día hablamos".

Al otro día llegó la recriminación de su estilista y peluquero personal: "Al otro día llega Kennys y empieza a mirar todo, los dos tecitos en las tazas de abuela, los dos finos sin descorchar y me dice 'vos sos una estúpida a cuerda'".