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Luisa Albinoni fue de las pocas que siempre se mostró comprensiva con Jorge Porcel Jr. y su drama, e incluso le ofreció en numerosas oportunidades trabajo. Sin embargo, el mediático siempre encontraba alguna excusa para rechazarlo, hasta que la actriz estalló anoche en Intratables.
Albinoni le propuso varias veces al hijo del capocómico que se incorpore a una pieza teatral que está produciendo. Si bien la paga no llegaba a las famosas "20 lucas", sí se trataba de una oferta real y concreta, que rondaba los 15 mil pesos, para ayudarlo a salir de la situación desesperante en la que se encuentra. Sin embargo, Jorgito no aceptó.
"No tengo interés de exponerme si no es sobre seguro. Necesito algo más sustancial en esta situación. No me pongan en lugar como que yo rechazo trabajos. No se habla del proyecto de Luisa en el aire. Yo necesito guita. La vocación por el teatro... viste. Si están los 15 mil pesos está bien", expresó "Porcelito".
"A mí me han prometido muchas cosas y después no me las dan. Me dejan en un lugar como que no quiero agarrar, y resulta que es todo verso. Vamos por parte, si hay 15 mil pesos, que estén", advirtió.
"Yo quiero algo serio, algo estable. Me estás poniendo en un lugar como que yo no quiero hacer las cosas. Lo agarraría solo por el dinero. No tengo ganas de estar expuesto", reiteró.
Anoche, en Intratables, la actriz terminó por explotar. "¡Me sentí una reverenda pelotuda!", expresó.
"Ninguno nace vago, se lo fomentan, los vicios los vamos tomando en la vida", argumentó, tratando de ser comprensiva, pero su hartazgo pudo más.
"Ojalá que consiga ir a Cuestión de peso. Él habla de discriminación, pero se encargó de discriminarnos como que éramos de un nivel cultural inferior", agregó, y se refirió al ambiente social que Porcel frecuenta.
"¡¿Todos esos amigos de un buen nivel cultural por qué no le juntan guita y se la dan?! Puse el apellido del padre, aprovechá, gil. ¡Es un gil, ya me calenté! Te digo, todas las cosas te las tenés que ganar rompiéndote el culo", disparó Albinoni.
Santiago del Moro aprovechó para empujarla a decir la famosa frase que pronunció frente a las cámaras de Crónica: "¡Perdón, pero me tienen las bolas llenas!", lanzó.
