viernes 29 de marzo del 2024
DESTACADA 09-01-2018 16:06

Catherine Deneuve defiende junto a otras mujeres "la libertad de importunar" de los hombres

En una carta publicada por el diario Le Monde, un grupo de 100 mujeres artistas e intelectuales aseguran que se ha llevado a cabo una “caza de brujas” a raíz del escándalo Harvey Weinstein .

Más de 100 mujeres, entre ellas la actriz francesa Catherine Deneuve, la escritora Catherine Millet y la artista alemana Ingrid Caven, firmaron el martes una carta en Le Monde para "defender" la "libertad de importunar" de los hombres y oponerse a la "campaña de delaciones" surgida tras el escándalo Weinstein.

En Hollywood, el movimiento Time’s Up, apoyado por más de 300 actrices, logró teñir de negro la ceremonia de los Globos de Oro en protesta contra las agresiones sexuales y en apoyo a las víctimas.

Además, Oprah Winfrey puso en pie a todo el auditorio de la premiación con un discurso combativo y directo contra “los hombres poderosos y brutales” que han dominado el mundo durante mucho tiempo. “Su momento ha llegado. Se acabó el tiempo”.

En Francia, un centenar de intérpretes, escritoras, investigadoras y periodistas firmaron un manifiesto rechazando el "puritanismo" que según ellas se instaló tras las acusaciones de acoso y agresión sexual contra el productor estadounidense Harvey Weinstein.

"La violación es un crimen. Pero tratar de seducir a alguien, incluso de forma persistente o torpe no es un delito, ni la galantería una agresión machista", arranca el escrito.

"Desde el caso Weinstein se ha producido una toma de conciencia sobre la violencia sexual ejercida contra las mujeres, especialmente en el marco profesional, donde ciertos hombres abusan de su poder. Eso era necesario. Pero esta liberación de la palabra se transforma en lo contrario: se nos ordena hablar como es debido y callarnos lo que moleste, y quienes se niegan a plegarse ante esas órdenes son vistas como traidoras y cómplices".

"Campaña de delaciones", "justicia expeditiva... ha habido hombres que han sido "sancionados en el ejercicio de su profesión, obligados a dimitir, cuando su único error fue haber tocado una rodilla, tratado de obtener un beso, hablar de cosas íntimas durante una cena profesional o haber enviado mensajes de connotación sexual a una mujer que no sentía una atracción recíproca", aseguran, hablando de una "ola purificadora".

Para este colectivo de mujeres, "esta fiebre de enviar a los 'cerdos' al matadero (en referencia al hashtag francés #balancetonporc ("Delata a tu cerdo"), equivalente del inglés #MeToo, NDLR), lejos de ayudar a las mujeres a ser autónomas, sirve en realidad a los intereses de los enemigos de la libertad sexual, a los extremistas religiosos, a los peores reaccionarios y a quienes estiman (...) que las mujeres son seres aparte, niños con una cara adulta, que reclaman ser protegidas".

"Como mujeres, no nos reconocemos en este feminismo, que más allá de denunciar el abuso de poder adquiere un odio hacia los hombres y hacia la sexualidad", recoge la carta.

Añaden, haciendo uso de un argumento que diversas ONG y organismos feministas han tachado de 'ad hominem', que "el filósofo Ruwen Ogien defendió la libertad de ofender como algo indispensable para la creación artística. De la misma manera, nosotras defendemos una libertad de importunar, indispensable para la libertad sexual".

En marzo pasado, Deneuve, de 74 años, levantó una polémica al defender en televisión a Roman Polanski, acusado de haber violado a una menor hace más de 40 años en Estados Unidos, al asegurar que el cineasta seguramente no sabía que la joven tenía 13 años. "Siempre le han gustado las chicas jóvenes. Siempre he pensado que la palabra violación era excesiva", dijo Deneuve en referencia a Polanski.