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Paula Chaves está con la libido bajísima desde que se convirtió en mamá, a tal punto que es capaz de pagarle una "profesional" a su pareja, Peter Alfonso, con tal de no tener que atender sus necesidades.
En el programa "Metro y Medio" de Sebastián Wainraich, Peter salió al aire a contar su realidad en la sección "Gordos con chorizo", en la que apoyan y tratan de ayudar a hombres en situaciones desesperantes.
"Siento un rechazo constante. Uno apela a las pocas armas de seducción, que son limitadas, y el rechazo es horrible", explicó el productor y actor.
"Además siempre estoy a contrarreloj, porque se puede cuando Olivia se duerme... Todo el día con intentos. A veces viene con sobornos. Hago de mulo, compro algo o preparo la cena. Hay promesa de concretar pero después no se cumple, por cansancio o lo que sea", agregó.
"Y los momentos en los que ella quiere, es un tren, viene con todo. Siempre hay que estar cerca para aprovechar", concluyó.
Paula escuchó las declaraciones de su novio y se defendió: "Hay que aclarar los contextos, por ejemplo ahora yo ahora estoy en la cama, maquillada, recién volví de trabajar y le estoy dando de comer a mi hija. Él está en la terraza, fumando un pucho, tomando algo... relajado".
"Cuando estuve 45 minutos bañándola, 45 minutos para hacerla dormir, no me jodas, quiero dormir, no vengas a querer garchar", disparó, sin vueltas.
Sin embargo, la modelo se mostró satisfecha con su pareja. "Mi marido me calienta muchísimo, si estoy necesitada no se me cruza por la cabeza estar con otro hombre porque me dan asco los demás", aseguró.
"Es el mejor hombre con el que estuve", destacó, y enseguida, muerta de risa, añadió que "estoy dispuesta a pagarle la puta para que no me moleste".
"El 90 por ciento de las mujeres que son madres van a pensar igual que yo", cerró la modelo.
