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Una vez más el medio que eligió fue Twitter. “Hiciste el que te importaba, nos usaste a mí y a tu hijo para de a poco acercarte a tu padre. Ni siquiera preguntás por tu hijo, no pagás la obra social, hoy me la volvieron a cortar”; escribió Jimena Campisi con la intención de escrachar a su ex y padre de su hijo Milo de tres meses, Tomás Costantini.
A eso se le sumó el trascendido de que Eduardo Costantini, padre de Tomás, le había sacado a su hijo el departamento que alquilaba en el Museo Renault para mudarlo a un dos ambientes de la calle Cabello y que, además, le habría negado dinero para que se fuera de vacaciones a Punta del Este en estos días.
Sin embargo, el joven empresario niega todo los trascendidos y asegura que se ocupa de su hijo y que ahorra dinero por él.
“Es todo mentira. Mi papá no me echó de ningún lado, se me vencía el alquiler el 5 de febrero y pagaba 3.400 dólares por mes y me parecía un exceso para mi realidad actual que es la de un padre con un hijo reestructurándose laboralmente, así que lo dejé y me volví a uno del cual soy dueño en Palermo”, aclaró Costantini a PERFIL para luego asegurar que la relación con su padre es de las mejores.
“Jimena inventa todo, así que no hablo más con ella. La llamo y le pregunto cómo está Milo y me responde: ‘Qué te importa?’. Hoy pagué dos mil pesos de obra social antes del vencimiento. Ella me pide una cantidad de plata exagerada de cuota alimentaria. Pide un exceso, supera el monto de un alquiler medio y lo que necesita ella y el bebé”, comentó enojado.
“Me dice que no soy un buen padre, que no estoy nunca, pero cada vez que voy me tengo que ir a la otra punta del país y gasto cuatro mil pesos sólo de viaje. No sé qué quiere, que me compre un avión”, agregó.
Para Tomás, el dinero no es un tema menor. “La plata de mi viejo es de él, yo tengo la mía. De mi hijo me hago cargo yo. Quiero cerrar este tema y quiero a mi hijo cerca”, finalizó.
