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La curvilínea chilena Adriana Barrientos llegó para quedarse. Desde que apareció hace algunos días en la pantalla de Showmatch, aunque nadie entendió del todo que este verano será la vedette de Carmen Barbieri, a todos les quedó claro que la rubia busca pantalla y guerra, y eligió como contrincante a Cinthia Fernández. La reina del hilo dental, sin embargo, prefirió no seguir la pelea. “Es una falta de respeto que alguien venga a gritar cosas o hacer gestos cuando estoy trabajando, para promocionarse”, dijo, y dio por terminado el asunto.
Sin embargo, la que se puso a dar batalla fue Moria Casán, que la tildó de “gato”, y la chilena respondió que “cuando se acaban los argumentos, empiezan con la denostación”.
“Esto es terrible. Aquí te tratan de gato como si nada, en cambio en Chile jamás se le habla así a una mujer. A las argentinas que van las hemos tratado muy bien”, lanzó en Infama, y denunció que Moria le habría pedido a la ex de Santiago Bal que la “devuelva” a Chile. Enseguida se comunicó la diva de la lengua karateca, para asegurar que ella no habla con Carmen. Encima, Fernández abandonó el móvil al enterarse de que estaba la chilena en el estudio. La guerra está declarada.
