miércoles 24 de abril del 2024
DESTACADA 12-11-2019 22:28

La tensión de Cristina Pérez y Rodolfo Barili por un cronista de Telefe

En medio de incidentes, los conductores perdieron contacto con el móvil enviado a Bolivia y vivieron momentos de angustia. Mirá lo que pasó.

La senadora opositora Jeanine Áñez se autoproclamó hoy como presidenta interina de Bolivia tras la renuncia de Evo Morales, pese a que la sesión extraordinaria convocada por el Parlamento no contó con el quórum necesario debido a la ausencia de los congresistas del partido gobernante MAS, donde son mayoría.

Morales, quien se encuentra en México tras recibir asilo político, criticó la asunción de Áñez como presidenta de Bolivia y lo calificó como un "golpe más artero y nefasto de la historia" del país.

En este marco, Telefe Noticias recorrió las calles de La Paz para mostrar cómo sigue la zona del conflicto y cómo lo viven sus habitantes. Sin embargo, el equipo enviado a Bolivia vivió un momento de suma tensión al tener que correr por los gases lacrimógenos que lanzaron a su alrededor. De pronto, la transmisión se cortó y la pantalla quedó en negro.

"¡Cuidado! Uy, uy, uy", se la escuchó decir a Cristina Pérez. "Refugiense", agregó Rodolfo Barili.

Shockeados por la situación, sin saber cómo se encontraban sus compañeros, los conductores tuvieron que continuar con el vivo. "Perdimos la señal de nuestros compañeros. Apenas la recuperemos vamos a contarles cómo están", dijo Pérez notablemente preocupada.

Varios minutos después, Mariano García, el periodista enviado a la zona caliente de la región, explicó lo sucedido. 

"Literalmente, se cortó el cable que une la cámara con la mochila de producción como consecuencia de que uno de los proyectiles terminó impactándonos en las piernas", contó mientras caminaba entre los manifestantes que se oponen a la asunción de la senadora opositora.

Luego, en otra salida del móvil, en medio de incidentes y caos, el cronista indicó: "Recién vivimos lo que ocurre en las calles, mucho nerviosismo muchas mujeres llorando... Y les digo la verdad, doy gracias que por lo menos podemos tomar el poquito aire que queda en La Paz sin tener que estar a las arcadas o abrazándonos a un poste de las luminarias, como estábamos recién, para evitar desmayarnos".

"Es la primera vez en 20 años que me dedico al periodismo que tengo una sensación de desmayo. Lo mismo que mis compañeros (Lucio y Gerónimo), que la pasaron peor porque recibieron el impacto de los proyectiles y las granadas en las piernas", concluyó, además de llevar tranquilidad a sus familias al asegurar que estaban todos bien.

L.M

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