Israel ganó por cuarta vez el Festival de la Canción de Eurovisión, con una canción inspirada en el espíritu del movimiento mundial contra el machismo #MeToo, votada por millones de espectadores durante la final del certamen, celebrada el sábado por la noche en Lisboa.
La canción "Toy" fue interpretada por la cantante israelí de 25 años Netta Barzilai, que afirmó sentirse "muy feliz" y agradeció a que la gente su "apoyo a la diversidad", al subir al escenario tras anunciarse su victoria.
"Gracias por haber aceptado la diferencia y apoyado la diversidad", declaró la cantante, llorando. "Adoro a mi país", añadió.
"I'm so happy, thanks for choosing difference, thank you for celebrating diversity" #Netta #Israel #Eurovision pic.twitter.com/HdaXXvXeyr
— BBC Eurovision (@bbceurovision) May 12, 2018
La artista logró convencer al público con su potente voz, sus muecas y su baile, en el que imitaba los movimientos de un pollo, en un duelo en el que se enfrentaba -según los corredores de apuestas- a la representante de Chipre, la cantante griega de origen albanés Eleni Foureira.
Esta última interpretó la canción titulada "Fuego", un tema de pop con un estribillo pegadizo cantado en inglés por el que se la comparó con Shakira o Beyoncé.
"No soy tu juguete, chico estúpido", repite Netta en una letra forjada al calor del movimiento reivindicativo #MeToo (YoTambién), nacido a raíz de acusaciones de acoso sexual a varios productores, actores y directores de Hollywood y fuelle para que mujeres de todo el mundo se animaran a denunciar en las redes sociales casos cotidianos de abuso sexual.
La canción, cantada en inglés con algunas palabras en hebreo y una en japonés, se refiere, según explica la cantante, "a alguien cobarde, un gallina que trata a una mujer como un juguete". Y el vocablo en japonés que repite la artista es 'baka', que significa estúpido, explica.
Netta quiere así caricaturizar a los "cobardes" que discriminan a las mujeres, a quienes las utilizan y no las tratan como seres "divinos", calificativo con el que describe en su canción a la heroína Wonder Woman.
De esta manera, la cantante israelí se ha erigido como un símbolo feminista capaz de mermar los estereotipos de género perpetuados en el mundo del espectáculo.
"It's an amazing time when women are finding their voices."
— BBC News (World) (@BBCWorld) May 11, 2018
Netta is singing for Israel at this year's #Eurovision with a song about the #MeToo movementhttps://t.co/KXJtUASWUc pic.twitter.com/tVqs8akD6A
Israel también ganó las ediciones de Eurovisión de 1978, 1979 y 1998.
Netta Barzilai sucede así al cantante portugués Salvador Sobral, vencedor el año pasado en Kiev.