Mónica Ayos: "Yo tengo un pie en el Obelisco, siempre"

Lino Patalano la convocó para protagonizar, junto a Marcelo de Bellis y Raúl Taibo, "Una Atraccion Fatal" en el teatro Roxy de Mar del Plata, y Mónica Ayos no lo dudó un segundo: abandonó por unos meses las múltiples tareas que, desde hace unos años, la tienen entre México y Miami, y se vino para La Feliz.

Semanario habló con ella en una tarde de playa junto con su hija menor, Victoria. "El más grande (Federico) está en México trabajando en una novela y Diego (Olivera, su marido) ya estuvo unos días acá. Como está terminando su novela viene los últimos quince días de febrero y ya se queda conmigo hasta el final de la temporada", aclara Mónica.

En la obra, Ayos interpreta a una cordobesa que es un acelere constante. "Pero en casa no hablo ni en cordobés ni en neutro, hablo bien en argentino –dice riendo– y no lo largo más".

–Muchos no comprenden por qué, estando en el exterior, donde tenés éxito y se gana en dólares, vengas a trabajar acá.

–La verdad es que soy familiera, acá tengo mi familia. Además, yo vengo sabiendo que me vuelvo a ir. Diego firmó un contrato exclusivo con Televisa por tres años más. Se hizo un lugar entre la novela que yo terminé, hasta la próxima que empiezo a grabar en mayo, y creí que era ideal para regresar y reencontrarme con la familia y con los escenarios argentinos. Yo tengo un pie en el Obelisco, siempre, por una cuestión de afectos, y además porque la gente me hace sentir que sigo vigente.

–¿Cómo vivís el amor a distancia?

–Ya no hay amor a distancia. Desde que nos movemos entre México y Miami las cosas son mas fáciles.

Lo de Ayos fue casi un acto heroico, siendo profeta en su tierra, teniendo trabajo, éxito y nominaciones al Cóndor de Plata, a dos Martín Fierro, y el cariño de la gente, decidió dejar todo e instalarse con su marido en tierras aztecas, donde no era conocida y debía empezar todo de nuevo. "Allá me fui sin muchas expectativas", reconoce.

–Es decir que te fuiste como ama de casa, no como actriz...

–¡Nooo! (ríe a carcajadas). Yo llegué siendo compañera de ruta, y como no puedo estar mucho tiempo quieta porque camino por las paredes, empecé a buscar lo mío y, bueno, acá me ves. Pero ama de casa, cero (más carcajadas).

@FernandoPRENSA

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