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El lunes 6 de diciembre, Susana Giménez se sometió a un lifting de cuello y un retoque para afinar y levantar su nariz.
Quedó muy conforme con los resultados y tuvo una buena recuperación. Tanto, que en sólo diez días viajó a Punta, donde festejará la Navidad.
Ni bien llegó a suelo esteño, la diva se puso al volante de su auto y junto a Mecha compartió horas en plan de intimidad y descanso.
Susana se refugió en su casa de Rincón del Indio. Apenas llegó se dedicó a podar sus plantas y acondicionar el jardín, mientras su hija, Mercedes, se encargó de comprar todo lo necesario. Este año, la diva extenderá su visita y también celebrará allí el Año Nuevo.
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