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“Estoy muy apenada, porque me parece injusto tanta agresión a una mujer que es buena persona, sensible, amorosa, buena hija y buena madre. No entiendo que hizo mi hija para tanto odio, tanta agresión”, dijo la señora quebrada y vía telefónica.
“Me hace sufrir muchísimo a mí y a mi familia. Tengo un dolor tan grande que sólo otra madre puede entenderlo. Es la única hija que tengo, por la que hice todo lo que pude. Tengo una afección cardiaca y sabemos que todos vamos a tener que irnos de este mundo en algún momento y me duele ver esto. Verla tan triste y apenada, preferiría que todos los golpes me los dieran a mi”, concluyó.
A estas palabras se sumaron las de Graciela. “Sos mi reina, mi diosa. Te agradezco la vida. Estoy orgullosa de lo que hiciste, de los valores que me diste y la fuerza. Porque honor tenemos muy pocas personas para defendernos contra viento y marea, contra crédulos e incrédulos. Yo me hago cargo de todo y eso me lo ensañaste vos, me diste armas para todo esto. Como decías, este hombre está dolido con la vida, no sólo conmigo. Tal vez pueda interpretar que él tenga un castigo por ese odio con esa enfermedad. No tengo problemas en pedir disculpas si él abre su corazón y me dice qué es lo que tanto le duele.”
Con estas palabras, Lilly, la madre de Graciela Alfano, dio su versión en “Ponele la firma” (América) mientras su hija visitaba el piso.
